Gracias a «Y LA CABRA TIRÓ AL MONTE» hemos podido recorrer diferentes proyectos. Conocer de cerca el mundo neo-rural, los proyectos sostenibles, los pequeños negocios con corazón… Es posible vivir con menos para ser más felices. Y nuestras cabras lo demuestran con su día a día, demostrando que es posible hacer las cosas de otro modo. Que el cambio no vendrá por arriba sino por abajo, por nosotros mismos.